El jefe de Microsoft ofrece una receta de austeridad para los males de la compañía

Según el WSJ, Microsoft está en una encrucijada y Steve Ballmer parece decidido a impedir que la gigante del software caiga en los típicos problemas que aquejan a las grandes compañías.

El jefe de Microsoft ofrece una receta de austeridad para los males de la compañía

El presidente ejecutivo de Microsoft Corp. aludió a•lo que llamó "los males de las grandes empresas", como un precio accionario estancado y problemas con la motivación de los empleados, para fijar prioridades más estrictas para la fabricante de software, que incluyen recortes de gastos por US$1000 millonés.

En un correo electrónico enviado a los 55.000 empleados de Microsoft ayer, Ballmer describió una empresa que sigue batallando con los efectos que un menor crecimiento tiene sobre sus empleados, accionistas y clientes.

Ballmer dio una receta para resolver los problemas, instando a los empleados a asumir mayor responsabilidad por su trabajo.

También llamó a la compañía, habitualmente afectada por cambios internos, a reducir lo superfluo en su organigrama, personal y estrategias. "No tenemos tiempo para el movimiento disperso", escribió.

El memorándum de 4900 palabras, parte de una serie de notas que Ballmer ha usado para aleccionar a sus empleados, se divulga en un momento en que se cree que Microsoft contempla una acción más radical para responder a las preocupaciones de los accionistas sobre el estancamiento de su acción y los 56.400 millones de dólares en efectivo con que contaba a fines de marzo.

Algunos analistas predicen que la empresa podría anunciar una recompra de acciones de hasta US$40.000 millones entre ahora y fines de julio, o al menos aumentar drásticamente los dividendos que reparte.

El último mensaje de Ballmer no se refirió directamente a esas posibilidades. Sin embargo, aludió a las inquietudes de los empleados de porque el efectivo no era utilizado para mejorar los beneficios de los trabajadores. Ballmer precisó que "el efectivo es dinero de los accionistas, de modo que necesitamos invertir en nuevas oportunidades o devolvérselo a ellos".

Después de leer los comentarios de los empleados en una reciente encuesta interns, Ballmer escribió' que "existen temas fundamentales que no están todo lo claros que nos gustaría". Identificó estos temas como grandes interrogantes que la compañía enfrenta. "¿Seremos los primeros con innovaciones importantes? ¿Acaso la excelencia en el proceso conducirá a una mayor capacidad para marcar una diferencia en las personas? ¿Acaso nuestra atención a los costos perjudicará a los empleados personalmente o mermará nuevas inversiones? . ¿Creceremos y subirá el precio de nuestra acción? ¿Seguirá la PC siendo una herramienta vital, y seguiremos siendo una gran compañía?"

Las preguntas reflejan el estado de Microsoft, así como el de la industria tecnológica en general, que está pasando de un período de alto crecimiento a una expansión más madura y moderada.

Ese cambio obliga a Microsoft y a otras tecnológicas a reorganizar la forma en que manejan a los empleados, clientes y accionistas. En el caso de Microsoft, el cambio es particularmente molesto mientras Ballmer intents revivir la cotización de una acción que ha estado estancada durante los últimos seis años.

Ballmer resalta que el precio de la acción de Microsoft casi no ha variado desde fines de 1998, pese a que la compañía ha duplicado sus ganancias operativas desde entonces. "La clave ahora para hacer crecer nuestra acción es aumentar nuestras ganancias aún más. Si mejoran nuestras utilidades, nuestra acción está lists para reflejarlo". Ayer, en la Bolsa de Valores de Nueva York, la acción de Microsoft bajaba US$0,49 para quedar en US$28,08.

Ballmer subraya que Microsoft no ha necesitado implementar los recortes de costos draconianos de otras tecnológicás. Sin embargo, expresó preocupación de que en los últimos tres años, los gastos de la empress crecieran con mayor celeridad que sus ingresos. "Obviamente, esta no es una tendencia que pueda continuar", escribió.

El ejecutivo reiteró un plan para reducir US$1000 millones en costos en el actual año fiscal, que cierra el 30 de junio.

Además de reflejar cambios en los beneficios de los trabajadores, los recortes provendrán principalmente de los ahorros generados por la unificación de las operaciones de marketing y publicidad de diferentes unidades de negocios, y la consolidación de los socios externos que usa para planificación de eventos y otras actividades ligadas a los clientes, dijo un vocero de la compañía.



Fuente: The WSJ/La Nación