El correo basura hace perder $ 260 millones

Calculan que cada usuario malgasta al menos quince minutos diarios borrando esos mensajes. Para las empresas es un costo adicional. Las pérdidas se derivan de la actualización de los sistemas de protección.


Argentina: El correo basura hace perder $ 260 millones

Avisos de sexo virtual, venta de cámaras fotográficas, anuncios de lugares increíbles para ir de vacaciones... las empresas en la Argentina registran pérdidas de hasta 260 millones de pesos por año por los daños que causa el constante incremento en el correo electrónico basura que reciben sus empleados.

Según un informe de Cabase, la cámara que agrupa a las firmas proveedoras de Internet en el país, las empresas pierden millones de pesos por "el empleo indebido de Internet" por la circulación de SPAM o mails basura en la Web. La cámara consideró que cada empleado que utiliza una computadora de una empresa en la Argentina debe dedicar quince minutos diarios para cumplir con la depuración de su correo.

Las principales quejas de los proveedores de Internet apuntan a la sobrecarga que se produce en los procesos de comunicación a partir del envío de correos electrónicos donde se les ofrece a los empleados servicios que van desde sexo hasta turismo.

Las pérdidas se vinculan a consideraciones tales como el tiempo que cada empleado debe dedicar durante su jornada laboral a borrar de sus computadoras y del sistema los correos no deseados. Para las firmas, que cuentan con sistemas propios de almacenaje de información, el mal empleo de los servicios de correo de su personal crea un sobrecosto significativo por la utilización de sus redes de comunicación.

Sebastián Bellagamba, titular de Cabase, aseguró que "el SPAM es consecuencia del uso indebido del correo electrónico que circula por Internet", y destacó "la magnitud que tiene este accionar por parte de aquellos que utilizan mal la Red".

La Cámara reconoció que anualmente se pierden $ 150 millones por causa de la recepción de correo electrónico basura en el ámbito de las empresas, sector que ocuparía a unos 400.000 usuarios. La cifra surge de una estimación realizada por Cabase, por la cual se perdería un monto de 120 millones de pesos anuales a partir de la obligación que tienen los empleados de borrar sus SPAM.

También se debe computar una cifra de 30 millones de pesos que las empresas dedican anualmente a la puesta a punto de los programas de selección del correo que ingresa en sus servidores, cifra que representa poco más del 4 por ciento de la facturación del sector.

Desde el sector privado se advierte que la modalidad de recibir correo basura crece de manera continua, ya que resulta imposible establecer mecanismos efectivos de control. A las pérdidas que sufren las empresas también se les debe sumar un monto de 80 millones de pesos anuales, por la eliminación (por parte de los filtros de SPAM) de aquellos correos electrónicos legítimos y que nunca llegan a sus destinatarios. "El incremento de volumen de SPAM comienza a ser un fuerte dolor de cabeza para los proveedores de acceso a Internet, ya que les ocupa mucha capacidad operativa. En algunos casos el 50 por ciento de los mensajes son basura", dijo Carrier.

Según la consultora, en la Argentina existe un total de 5,5 millones de usuarios de Internet que utilizan computadoras en cibercafés, hogares y en el trabajo.

El crecimiento que presenta el sector es del 17 por ciento respecto de 2003. De esta cifra, cerca de 2.700.000 personas ingresan a la Red a través de computadoras instaladas en los cibercafés en todo el país.

Sin embargo, un número similar de usuarios, un 50 por ciento de los consultados por Carrier, también entra a Internet desde sus hogares, y un 24 por ciento (cifra que se traduce en 1,3 millón de personas) lo hace también desde sus trabajos.



Fuente: La Nación