Siemens busca "reparar" su unidad de teléfonos celulares

Los principales problemas giran en torno a su posicionamiento dentro del mercado. Tiene gran competencia por parte de proveedores baratos

Siemens busca "reparar" su unidad de teléfonos celulares

Hace tiempo que el negocio de los teléfonos celulares es el que tiene perfil más alto. También se encuentra entre los más competitivos, volátiles y vinculados a la moda. Por eso, no es de extrañar que los expertos de la industria se pregunten si Siemens, el venerable gigante alemán de la ingeniería y la tecnología, no está asumiendo demasiados riesgos al tratar de "reparar" su castigada unidad de teléfonos móviles, en vez de deshacerse de ella lo antes posible.

Al mismo tiempo, el futuro de la unidad tiene gran importancia porque Siemens experimentará un cambio de liderazgo cuando Heinrich von Pierer sea reemplazado por Klaus Kleinfeld en enero de 2005.

Si bien la división de "comunicaciones" recientemente fusionada que comprende las unidades de comunicación móvil y de red fija representa sólo una parte de la amplia cartera de Siemens, el hecho de que sea la unidad más grande concentra toda la atención de su conducción y sus inversores.

Dentro de la división de comunicaciones, el principal problemato ocasiona la nada rentable unidad de celulares. Siemens asegura que la fusión del brazo celular con el de línea fija creará sinergias y le permitirá aprovechar la convergencia entre los diferentes tipos de tecnología.

También significa que pueden ofrecer una gama completa de productos de comunicaciones, desde redes hasta aparatos para usuarios finales.

Como tales, los teléfonos son integrales para la estrategia de Siemens, afirma Lothar Pauly director de Comunicaciones. A principios de este año, descartó una venta o un joint venture, diciendo que Siemens intentaría, en cambio, "reparar" la unidad en los siguientes 12 a 18 meses.

Sin embargo, muchos observadores no están convencidos de que Siemens realmente necesite seguir adelante.

Los principales problemas de Siemens con los aparatos giran en torno a su escala y posicionamiento dentro del mercado. Sus teléfonos con forma de "tableta de chocolate" normalmente tienen precios bajos o medios. Enfrentan gran competencia de los proveedores baratos y son susceptibles a los recortes de precios que aplica Nokia, porque se to permiten sus enormes economías de escala.

Los analistas también critican las técnicas de marketing que aplica Siemens, por considerarlas poco focalizadas. Si bien algunos productos fueron innovadores, como los teléfonos que permiten deslizar el teclado, es difícil determinar a qué tipo de consumidor apunta.

Por otro lado, las tendencias de la moda son impredecibles, y todavía es posible que la marea beneficie a Siemens.

Tal como lo descubrió este año Nokia, el sector de aparatos se convirtió en uno de los mercados de productos electrónicos más volátiles del mundo, donde los compradores son inconstantes y la lealtad a la marca ocupa un segundo plano detrás del diseño y la funcionalidad.

La participación de mercado del gigante finlandés cayó de 35% a menos de 30% en el primer trimestre de este año, por no haberse subido a la tendencia hacia los teléfonos con tapa protectora y por tardar demasiado en lanzar al mercado aparatos con cámara fotográfica para el mercado medio.

Siemens, que también carece de una línea completa de teléfonos con tapa, parece no poder aprovechar la debilidad de Nokia. Su participación de mercado cayó a 7,45%o en el tercer trimestre, comparado con el 8,9% del mismo período de 2003.


Fuente: El Cronista