La telefonia móvil logra un récord de facturación

El sector superará este año su récord de facturación, que se había registrado en 2000, antes que la recesión generara altos niveles de morosidad y pérdidas de clientes.

Argentina: La telefonia móvil va a facturar unos U$S 1.100 millones

Las empresas de telefonía móvil según un informe de la consultora Prince and Cooke- cerrarán el año con una facturación de 3.250 millones de pesos, una cifra que supera los ingresos de 2.920 millones de pesos del año 2000, aunque no equivale a la misma canfidad de dólares tras la devaluación.

Las previsiones más pesimistas indican que el año terminará con un parque de 12 millones de líneas móviles en uso, y las mismas operadoras aseguraron que en dos años duplicarán esta cifra.

Los planes 'control', ya sean prepagos o la combinación de abono más tarjeta, resultan la opción preferida por los nuevos consumidores, que en su mayoría "son personas de menores ingresos, ya sea de bajos recursos o jóvenes de alto nivel de ingresos pero con poco dinero disponible", comentó el analista Enrique Carrier, de Carrier y Asociados.

Una buena noticia para los consumidores la aporta el analista de Telenexo,-Iván Saubidet, según quien "el mercado que va a estar evolucionando en penetración, no tendrá modificaciones en materia de precios por la fuerte competencia en el sector y porque hay un interés muy grande en aumentar el use de telefonía móvil".

En ese sentido, Carrier comentó que la estructura de precios de este servicio "se va modificando. Hoy hay casi tantos planes como clientes, el precio del minuto varía muchísimo según la promoción, la hora del día, la tarjeta que se compra y esto seguramente va a seguir" en el 2005.

Con fuertes inversiones en redes y precios a la baja, el modelo de las empresas de telefonía móvil parece repetir el esquema de fines del 90, cuando al comprar una licuadora se recibía de regalo un teléfono móvil.

Las consecuencias se pagaron cuando la recesión generó para este sector una morosidad cercana al 10 por ciento y pérdida de clientes, sin olvidar que las compañías mantenían sus números en rojo


Fuente: La Prensa