En la Argentina, están cabeza a cabeza con las líneas fijas, que rondan los 7,7 millones.
El celular, una relación de amor y odio
El teléfono celular parece haber entrado definitivamente en la categoría de mal necesario. Al menos eso demuestra un sondeo realizado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), que revela que el móvil es el invento más detestado por la gente, aunque los encuestados admitan; al mismo tiempo, que no pueden vivir sin él.
Según el estudio del MIT, que reproduce la agencia AP, el 30% de los adultos manifestó esa mezcla de odio y necesidad contra el celular. El segundo invento en la lista de los menos queridos es el reloj despertador, con un 25% de los votos, seguido por la televisión, con un 23%, y las hojas de afeitar, con un 14%. Otras creaciones poco populares son los hornos microondas, las computadoras y los contestadores automáticos.
"La interconexión que uno obtiene con su teléfono celular es algo muy positivo y creo que es una de las cosas más importantes, ya que sirve para juntar a la gente", festeja el director del Centro Lemelson, Merton Flemings. "Lo malo es que uno a veces desea estar solo", matiza.
La encuesta es conocida como Indice de Invención Lemelson-MIT, y se viene realizando anualmente desde 1996 para determinar la actitud del público hacia los inventos, los inventores y la tecnología en general. El sondeo, llevado a cabo en noviembre pasado entre 1.023 adultos y 500 adolescentes, estuvo a cargo de la empresa Taylor Nelson Sofres Intersearch de Princeton, Nueva Jersey, y fue divulgado esta semana.
Cuestión de personalidad
Un trabajo sociológico patrocinado por Motorola y realizado en 2003 en todo el mundo divide en dos el universo de usuarios de teléfonos móviles; por un lado, los innies o introvertidos, que se ruborizan si el aparatito suena en público; por el otro, los outies o extrovertidos, que atienden a los gritos y convierten sus conversaciones en verdaderos discursos a la multitud.
El test para reconocerse en una de las dos categorías es responder a las siguientes preguntas, elaboradas por Sadie Plant, autora del estudio: ¿Le gusta exhibir su teléfono móvil en público? ¿Tiende a mantener dos charlas, la interpersonal y la telefónica a la vez? Plant afirma que el conflicto estalla cuando se juntan los innies y los outies en un mismo círculo social. "Ahí es cuando se genera el desacuerdo y la antipatía", define la experta.
Esta investigación hace una lectura sobre el comportamiento de los usuarios de celulares. Y descubre que una de cada diez personas posee un segundo portátil para aventuras sexuales, sobre todo en Estados Unidos, en donde los listados de llamadas se convirtieron en una de las principales pruebas que delatan a los adúlteros.
Lo que también observó Plant es que los hombres muestran su celular con orgullo viril, sobre todo si está entre otros de su mismo sexo.
En la Argentina
La cantidad de clientes de celulares, luego de perder 800.000 usuarios tras la devaluación, alcanzó en 2003 los 7,4 millones, 1,2 millón más que en 2002. El ritmo actual de yentas ronda los 170.000 aparatos mensuales y, por el momento, no da señales de disminuir. De hecho, están cabeza a cabeza con las líneas fijas, que rondan los 7,7 millones.
"Los celulares todavía están lejos de alcanzar su público potencial actual. Todavía hay 4 millones de personas que podrían tener un móvil y no lo tienen", afirma el consultor Enrique Carrier, director de Carrier & Asociados.
Fuente: El Cronista
viernes, enero 23, 2004
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