Rafael Bini / EL INTERACTIVO 2.0

El 35% de su facturación local se debe al área de servicios

IBM Argentina exporta un 25% de su producción de software

IBM Argentina ya exporta el 25 por ciento de su producción local de software a 16 países. Entre ellos, obviamente, están los de la región, como Chile, Brasil, Ecuador, Venezuela, México, Colombia y Paraguay. Entre los destinos menos previsibles están los Estados Unidos, España, Italia, Turquía, Grecia y Hungría.
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El centro de producción de software está ubicado en el campus tecnológico que la empresa inauguró en 2001 en Martínez, con una inversión de 50 millones de dólares antes de la devaluación. Allí también están concentrados los servicios de outsourcing (tercerización) de sistemas que IBM brinda a empresas como Telefónica, Nestlé, American Express, etcétera, y los laboratorios de tecnología mediante los cuales dan soporte a clientes regionales. También opera un call center en el que trabajan 300 personas atendiendo a los clientes de las filiales latinoamericanas de IBM.
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El 35% de la facturación de IBM en el nivel local corresponde al área servicios. Eso significa alrededor de 190 millones de pesos, dentro de los cuales está incluida la exportación de software. La compañía se organiza en varias unidades de negocio: hardware (servidores), software tradicional de integración, PC, servicios (donde se encuentra toda el área de tercerización de servicios) y software de misión crítica (para exportación).
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Marcelo Lema, presidente de la filial local, dijo que la Argentina tiene reales posibilidades de convertirse en un caso exitoso de exportación de software, pero se necesita una muy buena red de distribución y ventas en el mundo. Precisamente eso es lo que aprovecha IBM. "Nosotros hicimos la inversión en el campus antes de la devaluación, es decir que ya en ese entonces éramos competitivos, aun con el dólar uno a uno. Ahora nuestras posibilidades son infinitas", señaló.
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La Argentina exporta anualmente una cifra imprecisa entre 40 millones y 100 millones de dólares en software, la mitad de lo que declara Uruguay.

Fuente: La Nación